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Hay pequeños golpecitos
que se conjugan
en un gran golpe bajo...
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Hay pequeños golpecitos
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en un gran golpe bajo...
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El dialéctico enredo de vacíos y absolutos que tengo pintados en la piel que llevo a cuestas... Mezcla de sangres, ritmos y vidas opuestas-combinadas.
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- Soy poco más que un enredo -a veces cursi- de cosas raras y sentimientos explosivos, dialéctica en nuditos y materialismo en espirales de cristal que se exponen al fuego de cuando en cuando con el afán único de sobrevivirme a mí.
9 comentarios:
¡Excelente! Me encanta el ingenio de este breviario, casi epígrafe. Daniela, cuando te conocí nunca imaginé el talento que había en vos. Perdóname por no entenderlo entonces.
¡Va Pensiero!
Y hay golpes bajos que uno puede desgranar en golpecitos.
A lo que me preguntas en mi blog, amada Daniela, nunca hago promesas ni me las hago. La continuación de esa historia es más interesante, pero impublicable, aunque sea algo pasado. La historia del bus se prolongó de maneras muy curiosas. Gracias por visitarme. Algún día escribiré en mi blog de cuando te conocí, ¿te parece?
¡Va Pensiero!
¡Ah! Y lo de "me lo prometí" es una licencia literaria, como dijo Guido Sáenz para escaparse de lo que debió haber confirmado: que óscar arias y hermano y primo y de demás presionaron a la sala IV para pasar la reelección presidencial.
Gracias por todo, querida Daniela.
¡Va Pensiero!
Bajo, sucio y doloroso..
Y mira que si duele.
Excelente post... pocas palabras mucho sentir.
Bss!
Tienes toda la razón, el cúmulo de esos golpecitos se transforman con facilidad en un gran golpe bajo.
A una amiga le pasó que ya eran muchos los golpes bajos que le dio la vida que desistió de seguir soportándolos.
Hola Daniela, amiga de tamales compartidos, veo que tienes nuevas amistades. Creo que tus textos merecen ser leídos. Nos vemos en un café para hablar un buen rato.
ah sí, me ha pasado
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