11.03.2008

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Ya, ya, mucho. Si lo notaron ya se acabó. No es pa` tanto. Al fin y al cabo no lo ameritaba. Más bien me duró mucho, y eso, porque se me juntó con otras cosas. Ahora ya estoy bien y el naranja de nuevo combina conmigo. Por dicha ese tiempo era sólo una mancha corregible en el cuadro. ¡Qué suerte ser yo quién lo pinta, la dueña de los pinceles, las pinturas y el lienzo! ¡Puta, qué suerte en serio! Primero lloré un ratico, después me sentí idiota otro ratico y al final me dio chicha la mayor parte del tiempo, pero ya pasó, aunque… bueno, es difícil dejar de sentirme estúpida a ratos por creerle tantas mentiras (¡qué cagada!), aunque bueno si lo veo en comparación… ummm… no fueron tantas las que me creí… digo, hijo de puta este, pobres nenas. Maes, ¿saben qué estaba pensando ayer?… Que si esa vara (fuera-lo-que-fuera-pero-mentira-al-fin-y-al-cabo) hubiera durado unos meses más, en la de menos habría sido yo la nena-histérica-ya-sin-autoestima que anda tocando puertas ajenas buscando al mae que cree amar y que algún día creyó (o cree, no sé, pobrecilla) que la ama. ¡Nooooo! ¿Se imaginan a Daniela en ese plan? Sería toda “no yo”. Y es que sea como sea, locas y todo, mae… nadie se merece esa vara, ¿no?... Por eso digo, que son esa clase de maes – precisamente – los que sí se merecen algo taaaaaaaaaaaan malo como llegar a la reunión del XV aniversario de la graduación del cole escondiendo los errores (léase, la realidad), mentir sonriendo para parecer exitosos y saber en el fondo, que no han hecho nada con sus vidas, que tienen 32 años de mierda a cuestas – por más que traten de que no se les noten – y viven en el fracaso, mientras que hay gente con 23 que les parte la madre en casi todo, o bueno al menos en personalidad, madurez, experiencia y definitivamente… en realización personal. Gente con diez años menos de edad, pero con diez años más de sonrisas y recuerdos felices. El gobierno debería financiar una de dos opciones para ese tipo de gente: terapia intensiva de resocialización y auto aceptación, o bien, asistencia al suicida. ¿No creen?

3 comentarios:

Unknown dijo...

se necesita gente babosa a veces, para que la gente no-babosa se valore más

Marte dijo...

"No hay cielo sin infierno"

P.D. Yo no creo en el cielo ni en el infierno...

P.D.2. Van para el carajo los babosos!

10.21 dijo...

a-sis-ten-cia! a-sis-ten-cia!